CREA UN AMULETO Y FINALMENTE SE CONVIERTE EN JOYERA...

Si Jennifer Fisher hubiera vivido en la Europa medieval, probablemente habría encargado un anillo sello de los que llevaban algunos caballeros con las iniciales grabadas en caligrafía historiada. Pero cuando esta californiana de nacimiento (y neoyorquina de adopción) trataba de perpetuar un recuerdo en forma de joya, en 2005, no encontró nada a su medida.